COMPETENCIAS “BLANDAS”, ¿LAS MÁS DURAS DE INCORPORAR?
Tomando la misma experiencia de un artículo anterior en la cual una compañía exitosa (Nordstrom) consigue construir una verdadera y robusta cultura de trabajo, o cualquier otro caso en el cual una organización logra “aterrizar” su Estrategia de negocios y Valores en comportamientos diarios y visibles del equipo, observamos que esto es únicamente posible si se toma en cuenta la enorme importancia de contar con Líderes competentes Humana y Técnicamente, abiertos al aprendizaje, al cambio y en constante crecimiento. Para ello es fundamental contar de manera explícita o implícita con un programa permanente de desarrollo, entrenamiento y/o sostenimiento de las competencias necesarias para generar las formas de ver, pensar, sentir, conversar y actuar consistentes con lo que busca la organización.
Para ello es necesario observar y distinguir las diferencias entre Conocimiento y Saber, entre acumular información y verdaderamente aprender, y entre un programa de Formación y un proceso de Transformación. Una cosa es conocer lo que significa “Trabajar en Equipo”, los pasos a seguir, la importancia del trabajo en equipo, revisar algunos casos de éxito, mirar videos sobre el tema, informarnos sobre las mejores prácticas de Equipos de Alto Desempeño, e inclusive participar en talleres out-door con diversos juegos grupales; y otra cosa muy distinta es, con el apoyo de un Coach, observar las dinámicas de interacción de un equipo de trabajo, las posturas, la energía, las emociones que se manifiestan y los patrones de comportamiento grupal e individual que facilitan o impiden un fluido y sólido trabajo en equipo; para luego explorar las fuentes de dichas formas de interacción, identificar las competencias subyacentes a fortalecer, e iniciar un proceso de transformación en el cual cada miembro del equipo se sumerge en un profundo aprendizaje personal que involucra, hacer conciencia, mostrar apertura y desconfigurar sus patrones no saludables, iniciando posteriormente las prácticas específicas para incorporar las nuevas formas de Ser. De esta manera, y a través del constante entrenamiento y seguimiento se irá configurando en él y el equipo un nuevo saber…el Saber Trabajar en Equipo.
Podríamos aseverar por tanto que un Aprender efectivo es aquel que se transmuta en actitudes, comportamientos o nuevos hábitos, y que para incorporar habilidades blandas son indispensables herramientas, metodologías y plazos muy distintos que para el desarrollo de habilidades técnicas, administrativas o de gestión.
Para nosotros, un LíderCoach se constituye a partir de un profundo proceso de aprendizaje que inicia con un viaje interior de auto-descubrimiento y reflexión personal que permite ampliar el nivel de conciencia de sus propias sensaciones, creencias, emociones, actitudes, comportamientos y acciones.
Este re-conocimiento personal «rompe» de alguna manera con el automatismo inconsciente en el que los aprendizajes y tendencias condicionadas históricamente te hacen re-accionar o mover en los distintos ámbitos de la vida. Al tomar atención de tales patrones de pensamiento, emocionales, y de comportamiento, aparece la poderosa posibilidad de elegir nuevos y más efectivos caminos.
Competencias o formas de ser como «Estar Presente», «Apertura», «Conexión», «Dignidad», «Compasión», «Fluidez», «Integridad» y «Autenticidad» florecen y crean un consistente Liderazgo Ejemplar y Generativo, mediante el cual eres capaz ahora de Liderarte primero a ti mismo, para luego Liderar a otros coherente y efectivamente.
Postulamos que este nuevo SER nunca se podría construir con solo entender mentalmente a través de tips, presentaciones audiovisuales, análisis de casos sobre Liderazgo, Comunicación o Trabajo en Equipo, tampoco con la lectura de libros de auto-ayuda sobre el tema, o en talleres out-door o a través de cursos virtuales, sino que se cultiva mediante un entrenamiento sostenido, prácticas y más prácticas. Este proceso de Trans-formación requiere del acompañamiento de un Mentor-Coach.
Por consiguiente, para desarrollar o fortalecer las Competencias Blandas, que en definitiva son las más difíciles de incorporar y posiblemente las más relevantes para mantener relaciones saludables y para la Vida, intervenimos en dos o más niveles de aprendizaje, distinguiendo las Competencias Visibles de las que denominamos «Competencias Subyacentes».
A modo de ejemplo, para robustecer el Liderazgo es imprescindible mejorar la Comunicación, para lo cual deberíamos “tocar” y sumergirnos en el aprendizaje de por ejemplo la «Empatía», la que a su vez depende de una «Escucha Activa y Profunda», la misma que no puede manifestarse sin un adecuado nivel de silencio interior, «Conexión», «Atención Plena» y «Compasión». Notemos además que sin la presencia de estas «Competencias Subyacentes», la Actitud de Servicio, la capacidad de Negociación, el Desarrollo de otros, la Orientación al Logro, el mismo Trabajo en Equipo y otros comportamientos vitales para las Organizaciones y la Vida, no se pueden manifestar cabalmente.
Hemos explorado decenas de competencias subyacentes y visibles, sin embargo compartimos las principales:
Competencias Visibles que generalmente se observan y por lo tanto se desean desarrollar:
- Liderazgo
- Trabajo en Equipo
- Creatividad e Innovación
- Comunicación
- Responsabilidad (Accountability)…
- Desarrollo de otros
Competencias Subyacentes, entrenamientos fundamentales que no son fácilmente observables, pero necesarios para desarrollar las Competencias Visibles.
- Auto-observación
- Inteligencia Emocional
- Inteligencia Corporal
- Empatía
- Escucha Profunda
- Atención Plena
- Compasión
- Apertura
- Flexibilidad
- Compromiso
- Aceptación
- Dignidad
- Resiliencia
- Integridad
- Coraje
- Autenticidad…
~ Frethman Hervas J.